martes, 5 de junio de 2012

El rock y la industria: Los Grammy


Los estilos musicales nacen a partir de la fusión de otros tantos, que a su vez han derivado de otros y que a lo largo del tiempo han tomado directa o indirectamente elementos de otros para así conformarse a sí mismos. De allí la complejidad de englobar a grupos musicales en estilos que a veces no les encajan. Por ejemplo, la fusión del jazz, blues, country, rhythm and blues, gospel y folk ha originado el rock que todos conocemos, o no. Detengámonos en este tema, sin abundar en su historia. 
El pasado doce de febrero se celebró la entrega de los premios Grammy. Una de esas pomposas ceremonias que los estadounidenses no escatiman en denominar “los premios de la música”. Estos premios son entregados desde el año 1957 por la Academia Nacional de Grabación de Artes y Ciencias y es el máximo galardón al que pueden aspirar las agrupaciones que forman parte de la llamada “industria”.

En dicha ceremonia me llamó poderosamente la atención una circunstancia. Como alguna vez hemos visto, las bandas más populares, exitosas o trendys del año se suelen presentar interpretando alguna canción de su último trabajo, un clásico o un tributo a algún grupo de renombre. Foo Fighters (FF), grupo liderado por el ex batería de Nirvana Dave Grohl, se presentó a las afueras del Staples Center (lugar de celebración de premios), en una carpa habilitada con un escenario muy austero y justo después de la actuación del trillado David Guetta. Todo en unas condiciones diametralmente opuestas a las que había dentro del teatro, sin la parafernalia habitual ni el glamour de las estrellas del pop y los raperos de turno. Mientras tanto, dentro se presentaban Rihanna, Chris Brown y Bruno Mars en unos escenarios y puesta en escena dignos de video clips californianos.
Quizá FF en particular y el espectáculo del rock (popular) en general no tenían cabida dentro del ambiente irreal y de sonrisas forzadas de los Grammy. Esto no es algo puntual, ya es habitual que el rock viva en un limbo definitorio y de ambigüedad dentro de la industria musical desde que se comenzaron a otorgar este tipo de galardones.
Este ha sido una de los principales problemas que han tenido que afrontar estos premios, el rock como estilo es algo poco concreto, y ha sufrido cambios de denominación y categoría a lo largo de los años y a medida que ha ido evolucionando; pero estas “etiquetas” nunca han llegando a abarcar la totalidad del género, ni se han acercado a ello.
Desde la creación de los Grammy pasaron cuatro años hasta que se hizo la primera entrega a artistas rock, y fue a Chubby Checker por su mítico disco “Let’s Twist Again” en la categoría de Mejor disco de Rock & Roll, a sabiendas que era un disco de twist -eran otros tiempos y la novedad desconcertaba-. Pero no fue hasta la década de los 80’s cuando se popularizó el rock en la cultura popular sobre todo anglosajona, con artistas como The Eagles, Bruce Springsteen, The Police, Survivor (paradigma del grupo one-hit-wonder con su “Eye of Tiger”), Queen, Sting, Dixie Dregs, U2 entre otros; éstos conformaron la columna vertebral de rock de masas por varias décadas.
Pero eran demasiados y muy diferentes estilos de música, por lo que la academia recién optó por redenominar las categorías y clasificó el rock en premios a : La mejor interpretación vocal de rock solista, La mejor interpretación de un dúo o grupo con vocalista, La mejor interpretación instrumental de rock y a  La mejor interpretación de hard rock/metal, anteriormente denominada Mejor interpretación de hard rock/metal vocal o instrumental, siendo esta categoría la última en ser “creada” y la única que alcanza a concretar un género (o dos) específico, el hard rock y el metal.
En esta última categoría mencionada, el grupo ganador de este año fue Foo Fighters, los cuales no son ni hard rock ni mucho menos metal. Si vemos la lista de nominados en esta categoría están Mastodon (Heavy Metal), Megadeth (Heavy-trash Metal), Dream Theater (Metal Progresivo) y Sum 41 (punk rock). Lo único que hubiese sido peor sería haberle dado el premio a Sum 41, pero el resto de grupos cumplían todos los requisitos para llevarse el galardón en cuanto a estilo de música. Todos, excepto vender mas de 200.000 mil copias la primera semana de lanzamiento y liderar los principales charts o listas de éxitos del mundo. Pero bueno, todo ello no convierte a Sum 41 ni a Foo Fighters en grupos de metal, siguen perteneciendo a otras categorías. ¿Por qué nominarlos a una que no es la suya?
Con ello bromeaba por Twitter Dave Mustaine, líder de Megadeth, diciendo: “…I am just glad they didn’t pick someone ever farther from real metal like Adele o Taylor Swift”. Queriendo decir que se alegraba que el premio no lo ganase alguien más alejado del verdadero Metal como Adele o Taylor Swift, en clara alusión a FF que no son nada de eso.
FF se llevaría el premio a Mejor disco de Rock, Actuación de rock, Canción de Rock e interpretación de Hard Rock/Metal. Todo coherente menos lo último. El disco (Wasting Light) es de lo mejor en rock que ha salido en la última década y es sin duda la producción más completa del género en mucho tiempo; pero, otra vez, ¿por qué nominarlos en una categoría que no les corresponde?; Es como si se nominara a Adele como mejor artista country o Lady Gaga como mejor artista Jazz, nos llevaríamos las manos a la cabeza.
Pero esto no acaba allí, sólo el premio entregado a Mejor Actuación de Rock fue el televisado en directo. El resto fueron entregados en medio de los cortes publicitarios de la televisión y a cámara cerrada, en principio solo lo presenciaron los que estaban en el teatro. No solo les nominan y entregan el premio en categorías que no son acordes a su estilo, sino que no televisan la propia entrega. Quizá si el galardonado fuera U2, Sting o Springsteen la premiación si se televisara. No se trata de comparar a esas bandas y artistas míticos con FF, no se trata de eso, sino de honrar y dar el trato que se merece a un estilo y género que ha transformado la música y ha sido la fuente de cientos de estilos y miles de grupos que con mayor o menos éxito se han establecido en la industria.


No acapararán portadas, no tendrán discos de oro, no pondrán sus hits en los principales charts de Londres o New York; pero desde Chubby Checker hasta Foo Fighters pasando por U2, Red Hot Chilli Peppers, Eric Clapton y Metallica, el rock y sus variantes no merece ser menospreciado como en estos premios lo viene siendo, teniendo en cuenta que es el género que más ha hecho por la llamada “industria” a lo largo de los años. Curioso que se le dé máxima importancia al rock cuando estrellas en declive como Springsteen o McCartney sacan un disco nuevo (como precisamente sucedió este año), alimentando su leyenda y su cuenta bancaria.
Menos mal que las mejores bandas no se miden por los premios que reciben. ¿Alguien recuerda a Pat Metheny Group, Blues Traveller y Bonnie Raitt? Sí, yo tampoco. 

Nigel Tochón @nigeltochon

0 comentarios:

Publicar un comentario